Con el objetivo de facilitar el cumplimiento de las obligaciones tributarias y ahorrarnos tiempo, a comienzos de este año comenzó a regir la obligatoriedad de emitir boletas de forma virtual, con lo que se hace necesario contar con un sistema de facturación electrónica que permita una óptima gestión de todos los documentos tributarios electrónicos (DTE).
Al apoyarnos en un software especializado para la emisión de facturas, boletas y otros tantos DTEs no solo nos evita perder horas en trámites de timbraje, sino que además nos permite reducir costos de impresión y contar con un archivo más organizado.
En lo que a boleta electrónica respecta, la obligatoriedad de la boleta electrónica también conlleva beneficios para los consumidores finales, como mayor agilidad en las transacciones y la posibilidad de saber cuánto están pagando de IVA, lo que brinda mayor confianza.
Ahora bien, ¿cómo saber cuál es el mejor sistema de facturación electrónica? Para tomar una decisión acertada, es necesario considerar algunos factores clave.
¿Cómo elegir un software de gestión?
Para que el proceso de facturación electrónica sea expedito y libre de errores, es necesario apoyarnos en un sistema especializado y libre de limitaciones relacionadas con soporte o volumen de DTEs, algunas de las principales trabas de la plataforma gratuita del Servicio de Impuestos Internos (SII).
Ante este panorama, para determinar cuál es el mejor sistema de facturación electrónica existen algunos factores que nos ayudarán a evaluar las distintas opciones que encontremos y elegir la más conveniente:
Seguridad y accesibilidad
Una de las principales consideraciones a la hora de elegir un software de facturación electrónica tiene que ver con la seguridad. En ese sentido, es importante evaluar soluciones que cuenten con las debidas certificaciones. En Facele, por ejemplo, contamos con una solución soportada en Amazon AWS, con respaldo ISO 27001, lo que permite garantizar la integridad de la información.
Por otro lado, para que podamos emitir y gestionar los DTE en cualquier momento y lugar, es indispensable que el sistema sea cloud, evitando que el acceso se limite a determinados computadores o dependencias. Así, podrás dinamizar al máximo tus operaciones.
Usabilidad
Para que un sistema de facturación electrónica sea un real aporte a nuestro negocio, debemos asegurarnos de que sea intuitivo y, además, de que el proveedor ofrezca capacitación.
Además de lo anterior, en Facele entendemos que el proceso de facturación electrónica puede verse afectado por factores externos. Por eso, nuestra solución garantiza continuidad offline, posibilitando la emisión de DTEs aun cuando no estemos conectados a Internet.
Soporte en todo momento
Para resolver consultas sobre aspectos técnicos del sistema o solucionas eventuales contratiempos, resulta determinante que el proveedor ofrezca soporte técnico 24/7.
En Facele, además de brindarte ayuda con el uso de nuestra plataforma, también te ofrecemos asesoría tributaria, para que evites inconsistencias en tus finanzas y no tengas problemas con el SII.
Flexibilidad
Otra de las consideraciones a evaluar al contratar un software de facturación electrónica es que se pueda integrar a sistemas internos, como ERP u otros de desarrollo propio. De esta forma, las organizaciones pueden dar continuidad a sus flujos de trabajo, evitar redundancias y contar con información actualizada en todo momento.
Facele: la alternativa ideal para emitir DTE
En Facele entendemos que las organizaciones necesitan contar con un sistema que les permita cumplir a cabalidad con la obligatoriedad de emitir documentos como boletas y facturas electrónicas de manera simple y segura, algo clave a la hora de incrementar las ventas y lograr un mejor posicionamiento entre el público.
Por eso, hemos diseñado un sistema de facturación electrónica que cumple con todos los puntos antes mencionados, siendo una herramienta clave tanto para cumplir con la normativa como para potenciar los procesos de transformación electrónica, algo clave para mantener la competitividad y potenciar el crecimiento.